martes, 21 de diciembre de 2010

Hoy estoy contento. El mundo es un poco mejor.



Lo que ayer parecía imposible de conseguir, hoy se ha conseguido. La mal llamada ley Sinde, que debería haberse llamado ley SINSEntido, ha sido rechazada. Es una pequeña victoria pero muy gratificante. Ahora la revisarán en el senado, darán miles de millones a uno de los grupos minoritarios para que la aprueben y finalmente pondrán un punto donde antes había una coma y listo. Nos la meterán de nuevo diciendo que se ha revisado y modificado. Pero bueno, no deja de ser una dulce victoria.

Gran parte de este éxito es la movilización de la gente por Internet. Ha sido tanto el ruido que ha hecho que finalmente los políticos se han dado cuenta de una cosa, hay muchos votos en el aire. Aprobar esta ley hubiese supuesto perder muchos votos en la municipales y autonómicas del año que viene. Ni a CiU, ni  a CC, ni al PNV, le interesa perder un solo ayuntamiento por aprobar una ley que ni les va, ni les viene. Los únicos que estaban interesados en ella son los del club de la ceja, que no les van a dar ningún voto a ellos. Quien haya pensado que han cambiado por el contenido del texto que abra los ojos. Esto es un puro mercadeo de apoyos por pasta.

Lo importante es que la sociedad se de cuenta que los internautas somos legión y podemos opinar libremente, tanto en Blog como en las urnas. Da lo mismo si eres de izquierdas, derechas, arribas o abajos, la ideología que nos une es la libertad de expresión. Que fluya la información. Que cada cual decida por sí mismo. Quien quiera comprar que compre y quien quiera compartir que comparta. Unos lo llaman liberalismo y otros anarquía. Yo lo llamo simplemente Internet.

Sea como fuere, hoy me encuentro feliz.

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